sábado, 31 de diciembre de 2016

No sólo mueren las estrellas de la música (comercial)

Hoy es Nochevieja y se me ha ocurrido escribir algo sobre las estrellas del mundillo musical que "nos han dejado" en 2016. En las últimas semanas los medios de comunicación se llenaron de titulares al respecto. La lista es importante: George Michael, Leonard Cohen, David Bowie, Prince. Los cuatro, anglosajones, por supuesto; dudo que las muertes de Juan Gabriel o Antonio Tena hayan tenido tanto eco fuera de Latinoamérica o España.

Pero no voy a referirme a ninguno de estos artistas. No porque mi interés por ellos se limite a canciones sueltas o porque pretenda negarles un lugar en la historia de la música contemporánea. Simplemente, hay otros individuo, menos personajes públicos, que me llaman la atención tanto o más que aquellos.

jueves, 22 de diciembre de 2016

Música de Navidad

Aunque la categoría "música navideña" puede parecer una etiqueta comercial, no es así. Hoy la relacionamos, más que nada, con la easy listening que por esta época suena en ascensores, calles y comercios (desde el mercadillo hasta las grandes moles de compra y restauración ubicadas en la periferia urbana); con la banda sonora de película y anuncios publicitarios; o con cantantes vestidos de smokin (ellos) y de traje largo (ellas). Pero olvidamos que, muchísimo antes, coexistieron una música sacra ligada a la liturgia cristiana y una vertiente más profana y popular (como nuestros villancicos). Ninguna de las dos formas ha desaparecido, si bien es indiscutible la preponderancia actual de la "Christmas Music" ligera.

En esta entrada mostraré algunas de mis preferencias en la materia, como ya hiciera con el cine navideño. Una vez más, una selección estrictamente personal, sin ínfulas de magisterio.

jueves, 8 de diciembre de 2016

Cine navideño

Pues sí. Mi gato Poncho ya está preparando los regalos de Navidad. Eso significa que toca escribir sobre el cine propio de estas fechas. Nada de listas interminables. Sólo algunas sugerencias apoyadas en mis gustos personales.

Antes que nada, unas palabras sobre mi percepción de la Navidad. Al no ser creyente, no la experimento como un verdadero cristiano. Sin embargo, es la tradición en la que me crié y no sólo la acepto, sino que me gusta. Tradición que en mi familia fue la del portal de Belén y los Reyes Magos, no la de Papá Noel. Esto ha cambiado y desde hace tiempo los dos mundos (el cristiano mediterráneo y el pagano nórdico) conviven aquí en armonía. Lo diré sin rodeos: a Santa Claus lo considero un intruso y un ejemplo más de esa aculturación anglosajona que miro con suspicacia (ya tenemos Halloween; ¿para cuándo el pavo del Día de Acción de Gracias?). Pero como estas cosas no tienen marcha atrás, procuro adaptarme, no sin rezongar por lo bajo.

Para muchos, Navidad es sinónimo de tristeza, de consumismo y de falsedad. Sin dejar de reconocer lo que hay de cierto en esa afirmación, la comparto a medias. Puede que no sea con la alegría e intensidad de antaño, pero yo lo paso bien. Incluso, me reservo para la ocasión películas que dudo disfrutase igual en otro momento del año. Y en esto sí que asumo el liderazgo yanqui: el mejor cine navideño es el de Hollywood. Vamos, pues, sin dilación con mis favoritas del género.

martes, 6 de diciembre de 2016

Dos películas de guerra recientes


El bélico es uno de mis géneros cinematográficos preferidos. De niño y adolescente me tragaba casi cualquier largometraje del ramo que pasaran por TVE. La mayoría no soportaría un segundo visionado ahora, pero quedan en el recuerdo aquellas sesiones, normalmente sabatinas. El espíritu crítico y el interés por el cine antimilitarista vino después, con cintas como Apocalypse now o Senderos de gloria, por citar dos ejemplos de cajón.

Viene esto a cuento de que en la última semana he visto un par de películas nuevas. A una la podría clasificar de bélica clásica y a la otra de drama humano en medio de la guerra. Me explicaré.

domingo, 4 de diciembre de 2016

Punto de partida

¿Por qué este blog? La pregunta es legítima y voy a intentar responder lo más claro posible.

Siempre me ha gustado escribir. Recuerdo haber empezado no sé ni cuántos relatos en mi adolescencia, emulando a los que eran mis autores favoritos (Emilio Salgari y Julio Verne). Aquello nunca pasó a mayores, pero encendió en mí un interés por la escritura que luego se encauzó por otros derroteros. Dedicarme a la investigación histórica me ha permitido dar salida a esta inquietud durante unos cuantos años. Ahora que la Historia me interesa cada vez más como lectura, y menos como empeño, un blog parece un elección lógica.

¿De qué voy a escribir? Buena pregunta. En principio, de las cosas que me interesan hoy. O sea, de música, cine, literatura e Historia. Puntualizo: de la música, el cine, la literatura y la Historia que me gustan. No pretendo ejercer -mucho menos presumir- de entendido. No soy melómano, no  soy cinéfilo, no soy crítico literario, no soy miembro de la Real Academia de la Historia. Mi opinión no cuenta más ni menos que la de los demás. Pero es la mía, y en determinados temas quizá más informada (en otros, no).

Como no escribo con ánimo de sentar cátedra, sino por divertimento, dudo de que mis palabras interesen a alguien. Pero si así fuere, estaré encantado de leer tus comentarios, siempre y cuando cumplan las normas de educación que muchos parecen haber olvidado en tantos foros de internet. No se trata de ser políticamente correctos, sino de no faltarnos al respeto.

Así que un blog de cultura... Más bien de lo que surja, como reza la coletilla en los anuncios de contactos. Ese "lo que surja" puede ser la política internacional como el fútbol, el hambre en el mundo como la última monería de mi gato Poncho, una viñeta irreverente de El Jueves como una reflexión sobre la religión. Ya veremos.

A quien esto le parezca egolatría (o tontería), está en su derecho. Insisto: escribo porque me apetece. Por tanto, a priori no tengo ni idea de si lo haré regularmente o de Pascuas a Ramos. Lo que me pida la cabeza y permita mi tiempo libre.

Ya ves que uno de mis muchos defectos es encontrar la manera de abreviar y cortar. Vale, lo dejo aquí. Creo que con esto bastará como presentación. Bienvenido, y espero verte por aquí otro día.

P.D.: Como soy nuevo en esto de ser bloguero (?), De lo que me gusta estará en construcción hasta que le coja el tranquillo a Blogger. Disculparás los más que seguros errores y los continuos cambios en el diseño hasta que dé con el formato que me convenza.